Renacer: una bodega mendocina que se posiciona como modelo de gestión en la industria del vino premium

La adquisición de Bodega Renacer por parte del Miolo Wine Group en diciembre de 2024 marcó un punto de inflexión en el mapa empresarial del sector vitivinícola sudamericano. Ubicada en Luján de Cuyo, Mendoza —una de las regiones con mayor prestigio en la producción de vinos de alta gama—, Renacer no solo se ha destacado por la calidad de sus etiquetas, sino por la manera en que ha sabido construir una marca sólida, innovadora y con fuerte compromiso sustentable.

Este nuevo paso en su trayectoria refuerza la tendencia global de integración de bodegas boutique en grupos regionales más amplios, con el objetivo de escalar sin perder identidad, y posicionarse con mayor fuerza en mercados internacionales altamente competitivos.

De emprendimiento familiar a activo estratégico regional

Fundada en 2003 por el empresario chileno Patricio Reich, Renacer nació con el espíritu de un emprendimiento familiar, pero con una clara visión empresarial. En dos décadas logró consolidarse como un referente de exportación en más de 40 países. Su fusión con Miolo —grupo nacido en Brasil con más de 125 años de historia y una intensa expansión en los últimos 35 años— representa un movimiento estratégico que potencia las sinergias entre dos actores con fuerte arraigo regional.

La incorporación de Renacer al holding brasileño no solo amplía la cartera de Miolo, sino que suma valor agregado en términos de know-how, diferenciación de producto, y prestigio en una denominación de origen tan potente como Luján de Cuyo.

^{Adriano Miolo, CEO del grupo Miolo que adquirió la Bodega Renacer}

Modelo productivo mixto y foco en la trazabilidad

Renacer combina viñedos propios de alta calidad —17 hectáreas en Perdriel con Malbecs plantados en 1948— con una red de productores asociados en regiones clave del Valle de Uco y el Este mendocino. Esta estructura híbrida le permite operar con flexibilidad, adaptarse a la evolución del mercado, y diversificar riesgos climáticos y varietales.

La producción anual asciende a 1,2 millones de botellas, procesadas en una bodega equipada con tecnología italiana de precisión, tanques de distintos volúmenes para microvinificaciones y una sala de barricas de última generación. La trazabilidad y el control en cada etapa del proceso son ejes clave de su modelo operativo.

Además, Renacer fue una de las primeras bodegas argentinas en aplicar el enfoque de vinificación en partidas limitadas como diferencial competitivo, mediante tanques de entre 1.000 y 10.000 litros, lo que le permite crear ediciones exclusivas y series experimentales orientadas a nichos exigentes.

El capital humano como valor central

Uno de los activos clave de la bodega es su equipo enológico de alto rendimiento, liderado por Felipe Stahlschmid, con experiencia en Argentina, España y EE.UU., acompañado por el enólogo Gustavo Egea y el ingeniero agrónomo Luis Coita Civit. Este equipo trabaja en forma integrada desde el viñedo hasta la botella, y ha sido responsable de consolidar líneas premiadas y explorar nuevos desarrollos que combinan calidad con autenticidad.

El resultado de esta gestión técnica se refleja en reconocimientos como los 94 puntos en Descorchados para el Renacer Malbec 2022 o la medalla de oro de Mundus Vini para Punto Final Malbec y Milamore.

Innovación y diversificación como estrategia

El portfolio de la bodega refleja una estrategia clara de diversificación, que incluye desde sus íconos Renacer Malbec y Cabernet Franc, hasta etiquetas innovadoras como Milamore —primer vino de appassimento en Mendoza—, Punto Final Naranjo y Renacer Rosé Series, un rosado de edición limitada que cambia de variedad y origen cada año.

También desarrolló la línea Punto Final Orgánico, apostando por el consumidor consciente y el mercado vegano, con certificaciones tanto de procesos orgánicos como de productos sin insumos animales.

En términos de gestión de marca, Renacer ha sabido construir una identidad sofisticada pero accesible, orientada tanto a consumidores de alta gama como a segmentos jóvenes en búsqueda de vinos disruptivos y responsables.

Sustentabilidad como ventaja competitiva

Uno de los pilares estratégicos de Renacer es su modelo de gestión sustentable integral. Fue pionera en certificar la huella de carbono del delivery internacional en 2010, y participa en proyectos de compensación ambiental en la Amazonía y en energía eólica en Chile.

La instalación de paneles solares —que ya generan el 40% de la energía de la bodega—, el uso de insumos reciclables y ecológicos, y la reducción progresiva del peso de sus botellas a 465 gr (con meta en 420 gr) son acciones que no solo cumplen con estándares ambientales, sino que generan eficiencias logísticas y reputacionales.

Además, desde 2023 forma parte de la Sustainable Wine Roundtable, una plataforma global que promueve prácticas responsables en toda la cadena de valor vitivinícola.

Proyección y próximos pasos

Con su integración a Miolo Wine Group, Renacer planea reforzar su presencia en Brasil y Asia, donde ya cuenta con distribución activa. Se prevé una expansión del portafolio orgánico, mayor inversión en infraestructura energética y el fortalecimiento de alianzas con artistas y desarrollos culturales, como su evento anual Renacer Painted Edition, que reutiliza barricas en desuso intervenidas por creadores locales.

La historia de Renacer es un caso de éxito donde confluyen visión empresarial, gestión profesional, integración regional y compromiso ambiental. En un mercado global cada vez más competitivo y segmentado, su modelo operativo ofrece claves valiosas para otras empresas que buscan crecer con propósito y responder a las nuevas exigencias del consumidor internacional.

Te invitamos a escruchar la charla de nuestros colegas de Sabores de Argentina con Adriano Miolo