
La firma de un convenio de cooperación comercial entre PSJ Cobre Mendocino (San Jorge) y el Banco de la Nación Argentina marca un nuevo capítulo en la articulación entre minería y financiamiento público. El acuerdo, presentado como un avance estratégico para el distrito de Uspallata, busca acercar soluciones bancarias tanto a la empresa como a su red de trabajadores y proveedores, en condiciones adaptadas a la dinámica económica de la región.
La iniciativa no se limita a una relación comercial: refuerza la presencia institucional del principal banco público en una zona donde la actividad minera promete actuar como motor de crecimiento productivo. El objetivo es facilitar el acceso al crédito, promover la bancarización y ofrecer herramientas que acompañen la inversión proyectada para los próximos años.
Fundado en 1891 en el contexto de una crisis económica que exigía una sólida respuesta financiera, el Banco Nación nació con vocación de alcance nacional. Su estructura de capital estatal le permitió actuar como sostén de la producción y acompañar a los sectores estratégicos en momentos de expansión y de dificultad.
A lo largo de su trayectoria, la entidad ha tenido un rol activo en la asistencia a las PYMES, en el impulso a las economías regionales y en la provisión de servicios a localidades distantes de los grandes centros urbanos. El desembarco en Uspallata, asociado a un proyecto minero de gran escala, se inscribe en esta tradición de apoyo al desarrollo territorial.
El proyecto San Jorge, gestionado por PSJ Cobre Mendocino, avanza en su etapa de factibilidad con una inversión inicial de 15 millones de dólares, a la que se sumarán 559 millones de dólares durante el desarrollo completo. Estas cifras se traducirán en 3.900 empleos durante la construcción y 2.400 puestos en la etapa operativa, con prioridad para la contratación local y con condiciones laborales formales.
La compañía sostiene que sus operaciones cumplen con los lineamientos de la Ley 7722 y que la actividad se realiza bajo protocolos ambientales estrictos. Además, impulsa programas de capacitación técnica para trabajadores y fortalecimiento de proveedores regionales, con el objetivo de garantizar que la cadena de valor se construya con base local.
La estrategia incluye, asimismo, la contratación de empresas B y sustentables, como parte de un compromiso de largo plazo con la sostenibilidad y la economía social.
Uspallata, históricamente asociado a la actividad turística y al comercio de paso, busca diversificar su estructura productiva. La llegada de inversiones mineras, en conjunto con el apoyo financiero del Banco Nación, abre una perspectiva inédita de dinamismo económico.
El acuerdo entre PSJ Cobre Mendocino y Banco Nación, más allá de su alcance inmediato, es un mensaje sobre el rol de la minería regulada y financiada como instrumento para promover el desarrollo regional, generar empleo calificado y vincular al distrito con los circuitos de inversión nacional e internacional.