por Redacción Mendoza Económico
OpenAI anunció el lanzamiento de la aplicación Sora en Argentina, posicionando al país entre los primeros de América Latina en acceder a esta tecnología de creación de video con inteligencia artificial de nueva generación. La plataforma también llega a Chile, México, Colombia, Perú y otros mercados de la región.
Desde la compañía destacaron que Argentina cuenta con una comunidad creativa dinámica, clave para la expansión de herramientas basadas en IA. Con esta incorporación, artistas, creadores de contenido y usuarios en general podrán transformar ideas escritas en piezas audiovisuales de forma simple y accesible.

Sora permite generar videos hiperrealistas a partir de texto y ya está disponible en Argentina
Desde su lanzamiento inicial, Sora superó el millón de descargas en menos de cinco días, con cientos de millones de videos generados por usuarios. Tras su debut en Estados Unidos y Canadá, la aplicación se expandió a mercados selectos de Asia y ahora acelera su llegada a América Latina.
La app ya está disponible en sora.com, así como en iOS y Android, y es totalmente compatible con idioma español, lo que permite reflejar identidades culturales, estilos locales y narrativas propias de cada país.
Impulsada por Sora 2, el modelo avanzado de generación de video de OpenAI, la aplicación permite crear videos hiperrealistas o artísticos, remixar producciones de otros usuarios y descubrir contenido a través de un feed personalizado.
Una de las funciones más destacadas es “Personajes”, que posibilita proyectar la imagen del usuario —o creaciones imaginarias— en distintas escenas. “Hace que Sora no sea solo una herramienta creativa, sino una forma nueva y lúdica de interactuar”, explicaron desde la compañía.
OpenAI remarcó que el lanzamiento de Sora se realiza con un enfoque responsable desde el primer día. Todos los videos incluyen marcas de agua visibles e invisibles (C2PA), lo que permite identificar contenido generado con IA y combatir la desinformación.
Además, la plataforma incorpora filtros de seguridad avanzados, control total sobre el uso de la imagen personal y restricciones especiales para adolescentes, con límites de visualización, moderación humana y herramientas de control parental integradas a ChatGPT.